Por naturaleza, los bebés son de piel delicada porque han permanecido nueve meses en un ambiente líquido. Esto se aplica igual para sus uñas, que en principio serán blandas y quebradizas. Lo ideal es esperar a que estas se endurezcan un poco, lo que hará más fácil el proceso.
Sin embargo, algunos niños nacen con las uñas largas debido a que han tenido más tiempo de gestación. Esto provoca rasguños que angustian más a los padres y, entonces, puede tratarse de situaciones especiales. En estos casos, se recomienda limar o cortar con mucho cuidado las uñas del bebé. Escoge un momento en el que el bebé esté tranquilo, lo peor es intentarlo si está en movimiento o llora.
Nuestro limador de uñas portátil para bebé, te permitirá cortar sus uñas de una manera cómoda y segura, sin aproximarse demasiado a la piel.
Valoraciones
No hay valoraciones aún.